Calentadores estancos, más seguros y eficientes
Si necesita un calentador opte por uno estanco, ganará en seguridad y eficiencia.
Los calentadores son aparatos destinados a la producción de agua caliente sanitaria mediante la combustión de gas. Pueden ser atmosféricos o estancos. Los primeros toman el aire para realizar la combustión de la estancia donde están instalados. Los segundos, sin embargo, toman el aire del exterior y realizan la combustión en una cámara estanca.
Nueva normativa
Si tiene pensado cambiar su viejo calentador o instalar uno en una vivienda de nueva construcción, deberá optar por uno estanco. Así lo dicta una normativa que entró en vigor el 18 de abril de 2018.
Se trata de una modificación importante del Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE). El objetivo de la medida, en línea con la normativa de ecodiseño europea ErP, es promover el uso de tecnologías más eficientes y alcanzar así un ahorro energético del 20% para el año 2020.
Ventajas de los calentadores estancos
- Más seguros. La combustión se realiza en una zona aislada del calentador, lo que garantiza que no haya fugas de gases nocivos en la vivienda. Cuentan con un tubo biflujo que capta directamente el oxígeno del exterior. Una vez que se realiza la combustión, expulsan los gases quemados resultantes al exterior, por otro conducto del mismo tubo, con la ayuda de un ventilador.
- Menos contaminantes. Ejercen un control de la combustión preciso que reduce las emisiones de C02 y Nox a la atmósfera.
- Más eficientes. Gracias a su funcionamiento, son capaces de mantener una temperatura más estable, lo que permite un importante ahorro de gas y agua.
- Más confortables. Son aparatos fáciles de ajustar y de utilizar, ya que cuentan con encendido instantáneo, selección digital o controles táctiles, y permiten precisar la temperatura de salida del agua caliente. Algunos hasta se pueden conectar a tu smartphone vía Bluetooth, para llevar un control del consumo de agua y electricidad.